#SanidadDesnutrida: ¿Somos necesarios los D-N y TSD?
Dietista-Nutricionista o Técnico Superior en Dietética: aquella persona que hace o da dietas para adelgazar.
Esta sería la mayoría de la respuesta de muchas personas si les preguntáramos qué es un D-N o un TSD. Pero no, nuestras funciones van muchísimo más allá de esto. Aquí comienza parte del problema. Y los propios DN somos culpables también de ello, ya que al terminar la carrera no vemos salida más allá de pasar consulta limitada a pacientes con obesidad o sobrepeso.
Mi forma de ver la función del DN cambió totalmente al estar 6 meses de prácticas en el Hospital San Pedro de Logroño y el Universitario Marqués de Valdecilla de Santander.
Llegas asustadísima, ya que no tienes ni idea de cuál va a ser tu función ahí. He de reconocer que aprendí muchísimo. Jamás había visto en toda la carrera una analítica, y salí sabiendo interpretarlas. Vi la gran incidencia de la desnutrición hospitalaria. Las malas consecuencias de cirugías bariátricas. La necesidad de dar una nutrición enteral o parenteral a distintos pacientes. Y mil cosas más. ¿Y quién hacía todo esto? La endocrina, que en este caso, afortunadamente tenía también su carrera de nutrición y dietética. Su “ayudante” era una enfermera, la cual tenía que pasar por cada habitación que tenía solicitado por el médico el servicio de nutrición, y pesar y entregar la típica “hoja de dieta” a todo aquel que iba a consulta externa. El trabajo les desbordaba, llegábamos a estar más de 9 horas sin parar ni un momento, corriendo de lado a lado, sin prestar la suficiente atención a todos los pacientes. Esta endocrina y nutricionista era la primera en reconocer que ella necesitaba en su equipo a un grupo de DN, y no se cansaba de solicitarlo, veía la “sanidad desnutrida”.
Y lo más “impactante” de estas prácticas fue el trabajo en el que colaboré con una compañera DN becada por un laboratorio. El proyecto se llamaba “Valoración nutricional del paciente hospitalizado”. En él, eran seleccionados al azar 4 pacientes diarios, a los cuales se les hacía un seguimiento de peso, medidas antropométricas, analíticas sanguíneas y una encuesta nutricional. Y yo pensé… ¡genial! Por fin se demostrará la necesidad de los DN y TSD en sanidad, pero no… Obviamente, el laboratorio lo hacía con el fin de decir: “los pacientes están desnutridos, por lo que necesitan de nuestra nutrición a través de nuestros productos”.
El resultado final fue una buena sensación de todo lo que había visto que se podía hacer en un hospital respecto a la nutrición. Pero esa espina que se me quedó clavada de ver que hay tantísima labor nutricional y es llevada a cabo por gente que no está capacitada para ello, practicar un trabajo durante unos meses, que sabes que no vas poder conseguir…
Esto es algo que me rebota de manera directa en mi día a día, ya que trabajo en consulta privada. Muchos pacientes que vienen toman una cantidad exagerada de medicamentos, sin tener ningún control sobre su alimentación. Jamás han recibido una mínima atención nutricional que pueda evitar e incluso mejorar esas enfermedades. Es una lucha constante la que mantengo cada día en mi trabajo intentado explicarles las cosas de la mejor manera posible, que no conseguimos nada por muchos fármacos que tomemos sino mejoramos nuestra alimentación. Pero sé que esta lucha, tarde o temprano, tendrá su recompensa.
Simplemente haceos esta pregunta: si no somos necesarios, ¿por qué ha sido creada la carrera de D-N y la formación profesional de TSD?
Por todo esto, se convoca el 10 de mayo en Madrid una manifestación, ¡únete!
#SanidadDesnutrida